Introducir y enseñar a los niños temas científicos no siempre es una tarea fácil porque no a todos los papás y mamás se nos ocurren grandes ideas para hacer de la ciencia algo divertido, interesante e inolvidable. A veces compramos un libro de Ciencias Naturales y esperamos que el niño lo llene de principio a fin, y puede resultar buena idea (mi hijo es bueno para ello), pero llenar un libro tras otro no siempre significa que el niño ha aprendido, que ha hecho suyo el conocimiento y mucho menos que aplicará en su día a día la ciencia de forma natural.
Por estas razones comencé a buscar una alternativa más experimental, interactiva y divertida para la enseñanza de Ciencias Naturales y fue así como conocí la página web “ExperCiencia” de Belén Sánchez Seara, española, licenciada en Ciencias Físicas y madre de tres niños que durante un tiempo también fueron educados en casa. ¿Te imaginas que a la hora de enseñar ciencia, tuvieras de aliada a una mamá como tú, que te entienda pero que además sea científica? ¡Eso suena maravilloso!
Hoy tenemos la oportunidad de compartir con ustedes la entrevista que Belén nos ha regalado.
NAEC: ¡Bienvenida Belén!, qué gusto es tenerte en Nuestras Aventuras en Casa, queremos que te sientas como en tu casa… o como en tu blog.
BELÉN: Hola! Muchas gracias. Un placer poder charlar un rato contigo y con todas las personas que siguen tu blog.
NAEC: ¿Qué te parece si para comenzar nos cuentas un poquito sobre ti? ¿qué fue lo que llevó a una mamá científica querer educar a sus hijos en casa?
BELÉN: Cuando nació mi primer hijo, su padre y yo estábamos trabajando, así que él comenzó a ir a una guardería. Pero tuvo muchos problemas de adaptación, así que decidimos que yo dejaría de trabajar durante un tiempo para cuidar de él en casa. Yo siempre he mantenido muy viva la curiosidad científica, y pasaba muchos ratos con mi hijo así que empecé a mirar el mundo a través de sus ojos: descubríamos cosas juntos, jugábamos, experimentábamos, y poco a poco aquellas actividades de descubrimiento se fueron haciendo más organizadas. Buscaba información en Internet, y adaptaba los experimentos a nosotros. Volvimos a probar con la escolarización a los 3 años, pero de nuevo nos encontramos con problemas de adaptación, así que volvimos a casa, y así poco a poco este tiempo se fue prolongando. Mientras tanto, nacieron mis otros dos hijos y también se educaron en casa hasta que finalmente se incorporaron todos a una escuela rural, donde encontramos el tipo de enseñanza que se adaptaba a todos nosotros.
NAEC: ¿Qué es, y cómo nació ExperCiencia?
BELÉN: Como digo, debido a mi curiosidad, improvisaba primero actividades científicas. Después comencé a buscar información de actividades, pero casi todo lo que encontraba estaba en inglés, así que decidí abrir un blog para recoger todas esas actividades en español. Con el paso del tiempo, otras personas empezaron a ponerse en contacto conmigo para organizar estas actividades para otros niños y niñas, y empecé a hacer talleres de ciencia para niños en una escuela “libre” de Barcelona. Después vinieron las actividades en otras escuelas, cursos de formación para profesores en la enseñanza de las ciencias, cursos para padres, etc. Y experCiencia se convirtió en un proyecto de divulgación científica para todas las edades.
NAEC: ¡Wow, qué interesante! Según tu experiencia y lo que has observado en cada niño al que se le ha introducido a la ciencia de manera natural, ¿qué importancia tiene la comprensión de la ciencia en una edad temprana?
BELÉN: Como hemos oído todos en numerosas ocasiones, los niños son científicos por naturaleza. Tienen una capacidad innata para investigar, para explorar, para sorprenderse con cualquier fenómeno natural. Lo importante es que los adultos les proporcionemos espacios y herramientas para poder llevar a cabo esa exploración, para mantener viva esa curiosidad. Si permitimos esa exploración libre a edades tempranas, no tendrán miedo después en profundizar en ese conocimiento científico, realizando actividades más formales y guiadas cuando sean más mayores. Es importante, creo, transmitir la ciencia como el placer del descubrimiento, la satisfacción de entender cómo funciona el mundo, para después entender la capacidad que tenemos de transformarlo.
NAEC: ¿A qué edad recomendarías que se inicie esta formación en los niños?
BELÉN: La formación científica empieza desde el momento que permitimos que un bebé explore diferentes texturas o que experimente con el agua o la tierra en un parque. Hacer rodar o botar una pelota también nos da información científica. Alrededor de los 3 años, podemos organizar actividades más guiadas en las que el niño/a pueda experimentar mucho, pero también pueda empezar a describir con palabras o imágenes lo que sucede. A partir de los 6 años puede empezar a razonar, a entender por qué sucede un fenómeno y hacer predicciones de lo que sucederá según su experiencia y sus observaciones.
NAEC: ¿Qué es educación STEM?
BELÉN: El término STEM proviene del inglés (Science, Technology, Engineering and Maths). Es decir, se refiere a un tipo de educación que integra las disciplinas de Ciencias, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas. La educación STEM es una educación real, porque relaciona todos los aspectos que nos encontramos en nuestra vida real. Y además es una educación fundamentalmente práctica en la que de manera natural se crean las conexiones entre las diferentes disciplinas a través de la presentación del mismo concepto en diferentes contextos
NAEC: Es genial que este proyecto esté llegando y enriqueciendo las actividades de los niños en los colegios. Y es más maravilloso saber que de igual y hasta de mejor forma, lo podemos implementar en nuestras casas. ¿Cuéntanos sobre los cursos que ofrece ExperCiencia? ¿Qué aprendizajes se pueden adquirir en cada uno de ellos?
BELÉN: Actualmente ofrecemos un curso de Ciencias Naturales, un curso de Ciencia en la Cocina y una curso de Física y Química.
El curso de Ciencias Naturales contiene actividades que nos ayudan a descubrir algunos aspectos de los seres vivos: el funcionamiento del cuerpo humano, cómo se desarrollan las plantas, o las características de las aves. Y también contiene un apartado para descubrir algunos fenómenos meteorológicos.
El curso de Ciencia en la Cocina contiene numerosas actividades para descubrir fenómenos químicos, físicos o biológicos. Todas las actividades se pueden llevar a cabo con productos muy sencillos y habituales en cualquier cocina. Es un curso muy variado en cuanto a contenidos, que quizás sigue menos un curriculum determinado. Pero muy útil a la hora de descubrir la ciencia de las pequeñas cosas.
Finalmente, el curso de Física y Química contiene actividades para iniciarse en el conocimiento de reacciones químicas, disoluciones, procesos de cristalización, así como el fenómeno de la luz y el color.
NAEC: ¿Los padres que educamos en casa, podemos usar estos cursos como currículum para Ciencias Naturales?
BELÉN: Perfectamente! Estos cursos fueron diseñados originalmente como formación científica para maestras y maestros de primaria. Por lo tanto son cursos adaptados al currículum de la asignatura de Ciencias. Quizás el curso de Ciencias Naturales y el curso de Física y Química cubren más el currículum. Mientras que el curso de Ciencia en la Cocina es más lúdico.
NAEC: ¿Existe algún orden para tomar los cursos? ¿Hay alguna secuencia?
BELÉN: No hay un orden determinado. Aunque, pensando en la edad de los niños/as, lo habitual es que la enseñanza de las ciencias comience por el conocimiento de los seres vivos: el cuerpo humano, animales y plantas, que son lo más cercano a su experiencia diaria. Mientras que a edades más avanzadas se introducen conceptos científicos más abstractos como las reacciones químicas o el fenómeno de la luz y el color.
NAEC: ¿Qué opinas de cerrar durante un año (o más…) los libros de texto de Ciencias Naturales y salir directamente a la naturaleza para aprender? ¿Crees que de esta manera se pueden abarcar los temas que un niño necesita aprender?
BELÉN: Los libros de texto de Ciencias Naturales creo que son totalmente innecesarios para los niños/as. Creo que pueden ser una herramienta para los profesores o para los padres que educan en casa, si se usan como guía para el curriculum. El libro te servirá por ejemplo para saber que un niño/a necesita saber a determinada edad cómo se reproducen los animales, de qué se alimentan, conocer su hábitat, etc. Pero para hacerlo, puede investigar sobre un animal de compañía, un perro o un gato. O puede visitar una granja de su zona para alimentar y observar cómo se comportan los animales. O puede criar en casa unos simples gusanos de seda…Quizás ese niño esté fascinado por los tigres o los elefantes, pero esos animales no podrá observarlos directamente y su aprendizaje estará basado en lo que otros le cuenten sobre los tigres o los elefantes, no en su propia experiencia. Por eso insisto en que los niños deben trabajar sobre su realidad más cercana: animales o plantas de su zona, o fenómenos meteorológicos habituales en su región.
Este razonamiento es extensible a todos los temas que un niño necesita aprender relativos a las ciencias naturales. Sí que a edades más avanzadas, necesitará empezar a estudiar fenómenos que no necesariamente puede observar directamente, aunque sí podrá modelarlos o reproducirlos en un laboratorio.
NAEC: Estaría excelente que un día diseñes un curso o guía de actividades exclusivamente para exploración al aire libre, observación del entorno y trabajo de campo, pero a decir verdad, estuve viendo los contenidos del curso (VER AQUÍ) de Ciencias Naturales y me enamoré, porque además de experimentos trae buenísimos proyectos de campo y al aire libre como la creación de un mini huerto, algo que por cierto queremos retomar en casa este año. Belén, ¿Cuáles son las edades adecuadas para los cursos?
BELÉN: Sí que es cierto que muchas de las actividades están diseñadas al aire libre. Nosotros siempre salimos con la mochila preparada para lo que nos podamos encontrar. Los cursos están pensados para niños y niñas entre 6 y 12 años aproximadamente.
NAEC: Al llevar los cursos, ¿pueden los padres contar con algún tipo de tutoría que les ayuden a esclarecer las dudas que van surgiendo al realizar los experimento?
BELÉN: Existe un servicio de tutorías personalizado vía correo electrónico en cualquier momento. Además tenemos un grupo de alumnos/as en Facebook para compartir nuestras dudas con otros padres, madres y profesores.
NAEC:¡Qué bien! ¿Hay manera de imprimir el curso que se esté llevando para no necesitar siempre del ordenador o del iPad?
BELÉN: En cada curso se incluye un PDF con todo el contenido, que se puede imprimir libremente.
NAEC: ¡Excelente!, tener impreso y a la mano las actividades para realizar es muy importante, sobre todo si lo haremos al aire libre.
Belén, tengo una duda personal, y sé que la respuesta a esta beneficiará a todos los padres que estén leyendo la entrevista. Yo se que en la cocina contamos con algunas herramientas para trabajar ciencias de forma casera, pero habemos papás, que al educar en casa queremos ir un poquito más allá y tener algunas cosas de laboratorio y ciencias más en serio. Yo he estado buscando algún kit que sea de calidad, que contenga las herramientas necesarias para trabajar correctamente y de manera segura tanto al aire libre como experimentos en casa, porque actualmente solo tenemos una lupa y un frasquito, ¿podrías recomendarnos algún kit que se venda ya armando con las herramientas necesarias para trabajar ciencias en casa? o en su defecto nos podrías decir qué cosas son las más básicas que necesitaremos para realizar experimentos de forma más correcta y segura? ¿lentes de seguridad? ¿bata? ¿Qué tipo de pinzas? ¿un matraz?….
BELÉN: Yo no he encontrado hasta ahora ningún kit que cubra mis necesidades 100% porque normalmente los kits para niños son de menor calidad o están pensados más como un juguete. Así que con el tiempo he ido añadiendo elementos a nuestro “laboratorio”. Precisamente hace poco tiempo publiqué en el blog una lista de lo que considero imprescindible en casa: una lupa de 3 aumentos, una lupa binocular de 40 aumentos, unos prismáticos, un microscopio, otro microscopio portátil, una linterna o mesa de luz, instrumentos de medida: de longitud, tiempo, peso, etc. y una cámara de fotos o vídeo para registrar los resultados. (Leer el post de Belén haciendo click aquí).
Algunas herramientas que propones como lentes de seguridad, bata o guantes son útiles cuando realizas experimentos en los que es fácil mancharse o salpicarse, aunque no son imprescindibles.
NAEC: Muchas familias tenemos el ideal de educar en casa por mucho tiempo, ¿Recomiendas que en casa tengamos un microscopio? ¿Desde que edad? Y ¿Qué tipo de microscopio?
BELÉN: Por mi experiencia, el microscopio empieza a ser útil a partir de los 10 años, no antes. El problema es que la observación siempre requiere la preparación de las muestras, con lo que no resulta ni práctico ni atractivo para los niños más pequeños. Cualquier microscopio con una buena óptica es adecuado. Aunque personalmente siempre huyo de las versiones “para niños” que suelen ser de menor calidad y en muchas ocasiones con precio más elevado.
Lo que sí que recomiendo tener desde muy pequeños (2-3 años) es una lupa binocular. El aumento suele ser de 40x máximo y permite la observación directa de cualquier objeto: piedras, insectos, plantas, etc. y suele interesar mucho a todos los niños.
NAEC: Belén, te agradecemos de corazón que nos hayas regalado este tiempo, estoy segura que tu blog y los cursos serán una gran herramienta para los padres que queremos enseñar ciencias a nuestros hijos de forma divertida y que los aprendizajes se queden grabados en sus mentes.
BELÉN: Muchas gracias a ti por darme la oportunidad de llevar este proyecto que me apasiona a toda la comunidad latinoamericana. Espero que encontréis en el blog y en los cursos multitud de ideas para hacer de vuestros hijos e hijas grandes científicos y científicas.
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Así terminamos esta interesante entrevista, pero antes de que se vayan quiero invitarles a que pasen a la página web de ExperCiencia: CLICK AQUÍ. Ahí podrán descargar de forma gratuita el archivo en PDF “Seis maneras de incorporar la ciencia a la vida de tu hijo”.
Solamente con leer el blog de Belén, tendrán infinidad de ideas para realizar actividades y se darán cuenta de lo mucho que vale la pena adquirir también los cursos.
En agosto nosotros comenzaremos el curso de Ciencias Naturales, así que les iremos compartiendo nuestras experiencias trabajando con ello, en Instagram iremos subiendo algunas fotografías de las actividades que estaremos haciendo de la mano de ExperCiencia. Y mientras tanto nosotros ya estamos preparando nuestro espacio de ciencias.